AntologÕa de Textos Herm³ticos
LAS FUERZAS SAGRADAS DEL UNIVERSO MAYA
MERCEDES DE LA GARZA
2ª Parte (y 7)
LOS ESPACIOS SAGRADOS
(final)

Cancha de juego de pelota, Tikal.

53. Cancha de juego de pelota de Tikal, Guatemala (foto M. de la Garza). 
Uxmal. Juego de Pelota.Pirámide del Adivino. Uxmal.
El centro monumental de Uxmal con la Pirámide del Adivino, 
el Cuadrángulo de las Monjas y el Juego de Pelota. 

La cancha del juego de pelota (fig. 53; y arriba), como hemos dicho, representa el cielo; el juego es la repetición ritual del movimiento de los astros, y los caminos de estuco repiten en la tierra el curso de los astros. Estos caminos o rutas, encontrados en muchas ciudades de la península de Yucatán, se llaman sacbeoob, "caminos artificiales, hechos a mano" y "caminos blancos". Los sacbeoob son de diversos tipos; enlazan ya sea edificios de una misma ciudad (abajo) ya sea lugares secundarios o terciarios con una capital. Algunos sirven al mismo tiempo de diques para los lagos, y es posible que estén orientados según una dirección astronómica.81 
Sacbé de Labná. Yucatán.
El sacbé de Labná 

Si bien se han avanzado diferentes interpretaciones, sin duda alguna sus usos fueron simbólicos y religiosos, lo que está confirmado por diversos mitos sobre los sacbeoob sagrados antiguos y actuales. 

En diversas ciudades de la región Puuc, como Sayil, Labná y Kabah, encontramos un sistema interno de caminos que comunican los distintos grupos de edificios, y que siguen un eje norte-sur.82 Por otra parte, en el exterior de algunas ciudades se levantan arcos monumentales que constituyen el comienzo o el fin de un sacbé que une dos ciudades. Por ejemplo, al norte de Kabah hay un gran arco aislado construido sobre una plataforma independiente (estructura 1B1) (fig. 54), de donde sale un gran sacbé que termina en un arco idéntico en la ciudad de Uxmal. 

Arco ritual de Kabah, Yucatán.
54. Arco ritual de Kabah, Yucatán. 

Este gran camino parece haber tenido un sentido simbólico y ritual, representa un lazo religioso entre las dos ciudades. Así, el camino ha podido servir para las peregrinaciones religiosas, como las que se hacen en otros lugares mayas; para los simples desplazamientos a pie e incluso para el transporte de mercancías no era necesario construir una obra de la importancia del sacbé. Los caminos fueron construidos con mucho cuidado porque el viaje sagrado debía ser realizado por una vía sagrada que era la reproducción terrestre del gran "camino blanco" del cielo, la Vía Láctea, que es también el cuerpo del dragón celeste. 

El suelo calcáreo tenía un carácter celeste, ya que se le utilizaba sobre otros espacios divinos, como los terrenos de juego de pelota, símbolo del cielo, donde la pelota representa el movimiento de los astros, o en algunos patios y plazas donde tenían lugar diversas ceremonias religiosas. 

Arco ritual de Labná, Yucatán.
55. Arco ritual de Labná, Yucatán (foto M. de la Garza). 

El simbolismo del arco es universal; el arco representa el paso de un estado profano a un estado sagrado, el único que autoriza el acceso a un espacio sagrado, así como el puente o unión del nivel terrestre con el nivel celeste (como el arco iris); todo esto permite comprender esas construcciones mayas particulares que marcaban el punto de salida y de llegada de las vías sagradas o "sacbés" (fig. 55). Así, la función de los arcos que dominan los "sacbés" parece haber sido marcar el límite del espacio sagrado que constituía el centro ceremonial, y el paso bajo el arco debía ser un rito importante de ascensión. 

Así, las ciudades Mayas que se integran de manera dinámica y simbólica en el paisaje que las rodea, el cual posee también elementos sagrados, son el punto de encuentro entre los hombres y los dioses; conjuntos, paisajes y ciudades, "son la manifestación de las fuerzas divinas liberadas que se desarrollan bajo formas que revelan el orden cualitativo y cuantitativo de los mundos invisibles".83 

La concepción religiosa del cosmos fundamental forma parte integrante de la vida de los Mayas desde el período Clásico. Todas las obras excepcionales que nos han llegado son los testigos de una gran cultura cuyo eje era el vínculo de los hombres con lo sagrado, como lo expresan sus propias palabras dirigidas a la divinidad suprema: 

      ¡Oh tú, belleza del día! ¡Tú, Huracán; tú, Corazón del Cielo y de la Tierra! ¡Tú, portador de la riqueza, y portador de las hijas y de los hijos! Apórtanos tu gloria y tu riqueza; da la vida y el crecimiento a mis hijos y a mis vasallos; que se multipliquen y crezcan los que te alimentan y te mantienen; los que te invocan en los caminos, en los campos, al borde de los ríos, en los barrancos bajo los árboles, bajo las lianas...  

      Que sea buena la vida de los que subvienen a tus necesidades y llevan los alimentos a tu boca, en tu presencia, ¡oh tú, Corazón del Cielo, Corazón de la tierra... bóveda celeste, superficie de la tierra, las cuatro esquinas, los cuatro puntos cardinales! Que haya paz y tranquilidad delante de tu boca, en tu presencia, ¡oh Dios!84 

 Traducción: Miguel A. Aguirre

 

Antología

NOTAS 
81 Ver Garza, Mercedes De la, Ana Luisa Izquierdo, "Sacbeoob, caminos sagrados de los mayas", Revista Universidad de México, vol. 48, diciembre, 1993.
82 Pollock, Harry E.D., The Puuc. An Architectural survey of the Hill Country of Yucatán and Northern Campeche, México, Cambridge, Peabody Museum of Archaeology and Ethnology, Harvard University, Cambridge Massachusetts (Memoirs of the Peabody Museum, volume 19), 1980, p. 140. Otros grandes sacbeoob dignos de ser citados unen la ciudad de Cobá con Yaxuná (situada a 20 km. al sudoeste de Chichén Itzá), con Ixil y con Kucicán.
83 Ortega Chavez, Germin, "Teoría de las ciudades mesoamericanas", Cuadernos de arquitectura mesoamericana, n. 16, México, Universidad Nacional Autónoma de México, División Estudios de Posgrado, 1992, p. 8.
84 Popol Vuh, Garza, Mercedes De la, Literatura maya..., pp. 94-95. Popol Vuh. Les Dieux, les Héros et les Hommes de l'ancien Guatémala d'après le Livre du conseil por Raynaud traducción francesa, París, 1980, Ed. A. Maisonneuve y L'Esotérisme du Popol Vuh por Girard, París, 1983, Ed. A. Maisonneuve.