EL ANCIANO
Este anciano que tiene entre sus manos un papiro desplegado encarna la tradición y la doctrina. Por ello es también una imagen de Saturno, que en su aspecto celeste es el padre antiguo y arquetípico que conserva la memoria del mundo, la cual difunde a los hombres el joven Mercurio, mensajero de los dioses. Fijémonos que este anciano está situado en la base de un pilar o columna que es el símbolo del Axis Mundi que conecta la tierra con el cielo. La presencia de ese pilar acentúa aún más la estilización y verticalidad de la figura de la Virgen, como si con ello el Parmigianino hubiera querido remarcar el sentido aéreo y sutil que todo el cuadro parece sugerir.